Instalaciones de climatización: Funcionamiento y tipos
Una instalación de climatización es un equipo que puede aumentar o reducir la temperatura de un espacio y, en ocasiones, mejorar la calidad del aire. Los más comunes son los aires acondicionados y las bombas de calor.
¿Qué son las instalaciones de climatización?
Las instalaciones de climatización son máquinas que modifican la temperatura de viviendas y locales para alcanzar los niveles de confort térmico determinados por el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios (RITE).
| Estación | Temperatura | Humedad relativa |
|---|---|---|
| Verano | 23 a 25 °C | 45 a 60 % |
| Invierno | 21 a 23 °C | 40 a 50 % |
Tipos de sistemas de climatización
Las instalaciones de climatización pueden clasificarse en base a dos criterios principales:
- Según su tecnología podemos encontrar sistemas aire-aire, aire-agua, agua-agua o agua-aire. El primer término que aparece antes del guion se refiere al medio con el que funciona la unidad exterior, mientras que el que aparece después se refiere al que circula por la unidad interior.
- Según su uso encontramos sistemas domésticos y sistemas industriales.
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Sistemas de climatización según su tecnología
Sistemas de climatización aire-aire
Las instalaciones de climatización aire-aire también se conocen como sistemas de expansión directa. Se trata de equipos que utilizan un fluido refrigerante para absorber el calor del aire y trasladarlo.
Las características principales de los equipos aire-aire son:
-
Refrigeración y calefacción en el mismo sistema
Los equipos más modernos producen tanto calefacción en invierno como refrigeración en verano. La parte negativa es que no sirven para generar agua caliente sanitaria.
-
Instalación fácil y económica
Se trata de sistemas fáciles de instalar, con un precio medio de 800 €.
-
Consumo energético alto
Los sistemas aire-aire se conectan a la corriente eléctrica para generar frío y/o calor. La electricidad es una de las energías más caras, con un precio medio de 0,14 €/kW.
-
Versatilidad en el uso
Dentro de los sistemas aire- aire encontramos los aires acondicionados split, que son ideales para la climatización de viviendas y pequeños locales, mientras que los sistemas por conductos son perfectos para empresas, centros comerciales y grandes oficinas.
Los aires acondicionados son el sistema aire-aire por excelencia. Podemos encontrar tres tipos de equipos diferentes:
- Aire acondicionado split: consta de una unidad exterior que extrae el aire de la calle y una unidad interior que expulsa aire frío o caliente al interior.
- Aire acondicionado por conductos: al igual que los sistemas split dispone de una unidad exterior. La diferencia es que este tipo de equipos transporta el aire a través de una instalación de tubos ocultos bajo un falso techo.
- Aire acondicionado portátil: se trata de equipos de pequeño tamaño que absorben el aire del exterior a través de un tubo flexible para posteriormente usarlo para enfriar el interior.
Sistemas de climatización aire-agua
Los sistemas de climatización aire-agua extraen la energía calorífica del aire, pero se diferencian de los anteriores en que estos transmiten esa energía a un fluido refrigerante que modifica la temperatura del agua que circula por los emisores de calor: radiadores o suelo radiante.
Estos sistemas tienen las siguientes particularidades:
-
Climatización y agua caliente
A diferencia del aire acondicionado, los sistemas aire-agua pueden generar calefacción, refrigeración y también agua caliente sanitaria (ACS).
-
Alto rendimiento
Su rendimiento se sitúa entre el 400% y el 600%, es decir, por cada kilovatio de electricidad que utilizan generan entre 4 y 6 kilovatios de energía calorífica.
-
Sistema renovable
Aunque necesitan la electricidad para poner la máquina en funcionamiento, los sistemas aire-agua extraen 3/4 partes de la energía que utilizan del aire de manera gratuita. Esto beneficial al medioambiente y hace que el precio de las facturas se reduzca notablemente.
-
Inversión alta
El coste de la instalación es bastante alto y por norma general supera los 12.000 €. El lado positivo es que su bajo consumo energético hace que, a largo plazo, los sistemas aire-agua supongan un ahorro.
El tipo de sistema aire-agua más popular es la aerotermia. La hay de varios tipos:
- Sistemas mixtos: producen calefacción, refrigeración y agua caliente. Es el sistema más completo, pero también uno de los más caros.
- Aerotermia para calefacción y refrigeración: su precio ronda los 5.000 €, pues carece del hidrokit que sirve para generar agua caliente.
- Aerotermos: solo generan ACS. Su precio está entre los 1.500 y los 3.000 €.
- Aerotermia de alta temperatura: se puede combinar con radiadores tradicionales, porque impulsa el agua a 80ºC. Su precio es más alto incluso que el de los sistemas mixtos, llegando a superar los 20.000 €.
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Sistemas de climatización agua-agua
Las instalaciones agua-agua extraen la energía calorífica del agua para calentar o enfriar un circuito de tuberías por el que también circula el agua. Un ejemplo de esto es la geotermia, que absorbe el calor de las aguas subterráneas y lo transmite a los circuitos de radiadores o suelo radiante.
A continuación te mostramos las ventajas y las desventajas de estos sistemas:
-
Versatilidad total
El mismo sistema genera calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria.
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Ahorro a largo plazo
Pese a su elevado precio, acaban suponiendo un gran ahorro debido a su escaso mantenimiento y consumo, que es mucho más bajo que el de la aerotermia, y a su larguísima vida útil.
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Sistema renovable
La geotermia extrae su energía calorífica del interior de la tierra. Se trata de una energía verde e inagotable que reduce el consumo energético en un 80%.
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Instalación compleja
El proceso de instalación es complejo e implica realizar un estudio de los alrededores de la instalación, del clima y de la vivienda. Para poder llevar a cabo una instalación de este tipo es imprescindible contar con un terreno, pues hay que horadar la tierra.
Sistemas de climatización agua-aire
Los sistemas de climatización agua-aire calientan o enfrían las tuberías de agua, que ceden su temperatura a un intercambiador de calor y este, al aire. Un ejemplo son los fancoils, los radiadores de agua y el suelo radiante.
Sistemas de climatización según su uso
Instalaciones de climatización de uso doméstico
Las instalaciones de uso doméstico sirven para climatizar viviendas, locales y oficinas de pequeño tamaño.
Los aires acondicionados split suelen tener una potencia inferior a 8 kW, los sistemas por conductos, en torno a 15 kW, y los sistemas aerotérmicos, menos de 20 kW.
Para viviendas, los sistemas de climatización más comunes son el aire acondicionado split y la aerotermia.
Instalaciones de climatización de uso industrial
Los sistemas de climatización industriales suelen tener una potencia muy alta y es muy común que el proceso de refrigeración se realice a través de conductos.
Para los espacios grandes es común utilizar aire acondicionado por conductos, sistemas aerotérmicos de alta potencia y geotermia.
