Calderas eléctricas: precios, tipos y funcionamiento
Calderas eléctricas: comparativa de precios
Caldera eléctrica desde
Para calefacción y ACS
- IVA incluido
- 15 kW de potencia
- 12 niveles de modulación
Caldera eléctrica desde
Solo para calefacción
- IVA incluido
- 15 kW de potencia
- 12 niveles de modulación
Caldera eléctrica desde
Solo para calefacción
- IVA incluido
- 10 kW de potencia
- 3 niveles de modulación
Las calderas eléctricas proporcionan calefacción y agua caliente calentando el agua que circula por grifos, radiadores y suelo radiante. El precio oscila entre los 900 y los 2.500 € y varía en función del tipo de si es una caldera eléctrica mixta o solo para calefacción.
¿Cómo funciona una caldera eléctrica?
La caldera eléctrica es una alternativa a las calderas de gas convencionales que funcionan con gas natural o propano. Normalmente, se utiliza cuando la red de gas natural no llega a la zona, pues este es más barato que la electricidad.
Las calderas eléctricas utilizan unas resistencias que se calientan con el paso de la electricidad y que, a su vez, aumentan la temperatura del agua con la que están en contacto. Para que esto suceda, la caldera ha de estar programada para que se encienda cuando la temperatura de la estancia sea inferior a la deseada.
Para ello se suele utilizar un termostato que, conectado a la caldera, le indica cuando debe ponerse en funcionamiento.
Caldera eléctrica: precio
El precio es un factor fundamental cuando se pretende comprar una caldera eléctrica, pero es necesario encontrar un equilibrio calidad-precio y no fijarse únicamente en aquellas que son más baratas.
El precio de una caldera eléctrica depende de factores como la marca, la potencia, los materiales de fabricación y la tecnología que incorpora. El rango de precios va desde los 800 € a los 2.500 €.
Marca | Precio mínimo | Precio máximo |
---|---|---|
Gabarrón | 950 € | 2.500 € |
ACV | 1.250 € | 2.300 € |
Baxi | 1.150 € | 1.300 € |
Domusa | 830 € | 2.100 € |
La cabeza fría y la casa caliente
Instalamos o sustituimos tu caldera desde 1.000 €
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Un ejemplo de caldera eléctrica económica es la caldera eléctrica Domusa HDEEM 45/90, con las siguientes características:
- Precio: 830 €.
- Solo calefacción.
- Potencia: 9 kW
- 2 niveles de modulación: puede trabajar a 9 kW y a 4,5 kW.
Si prefieres una caldera eléctrica de alta gama, te recomendamos el modelo Mattira Mixta CMX15i de la marca Gabarrón:
- Precio: 2.400 €.
- Calefacción y ACS.
- Potencia: 18 kW
- Acumulador de agua caliente sanitaria: 50 litros.
- Modulación de la potencia en tramos de 1kW.
¿Cuáles son las mejores marcas de calderas eléctricas?
- Gabarrón: la mejor marca de calderas eléctricas. Sus aparatos cuentan con una gran capacidad de modulación (en pasos de 1 kW).
- ACV: marca que cuenta con casi 100 años de antigüedad. Sus calderas son muy buenas y fiables. Fabrican calderas eléctricas y de gas. Tienen un precio elevado.
- Baxi: marca algo más económica que ACV. Sus calderas cumplen perfectamente y tienen buen nombre en el mercado.
- Domusa: es la marca más nueva y también la más económica, aunque tiene modelos de alta gama que llegan a los 2.000 €. Fabrica tanto calderas murales como de pie.
Tipos de calderas eléctricas
Para tomar la decisión de comprar una caldera eléctrica es muy importante conocer los diferentes tipos de calderas que existen y cuáles se adaptan más a nuestras necesidades e instalación.
Podemos categorizar las calderas en función de dos criterios:
- Según su uso: las calderas mixtas proporcionan agua caliente y calefacción, al contrario de lo que ocurre con las que ofrecen solo calefacción.
- Según la instalación eléctrica: existen calderas aptas para corrientes monofásicas y para corrientes trifásicas.
Tipos de calderas eléctricas según su uso
Tipos de calderas eléctricas según la instalación
Calderas eléctricas para calefacción
Estos equipos están diseñados para producir únicamente calefacción y no agua caliente sanitaria. Tienen un único circuito de agua y no cuentan con acumulador. Requieren menor potencia que las calderas mixtas, ya que están destinadas a un solo uso.
Algunas calderas eléctricas exclusivas para calefacción pueden adaptarse para producir ACS con ayuda de un kit que facilite la integración con un acumulador de agua externo.
Calderas eléctricas mixtas
Se trata de calderas eléctricas que producen calefacción y agua caliente sanitaria (ACS). Algunos modelos producen agua caliente de forma instantánea, mientras que otros utilizan un acumulador para almacenar el agua y suministrarla cuando el usuario abra un grifo. Lo más común es que el acumulador tenga entre 50 y 80 litros de capacidad.
Caldera eléctrica monofásica
Las calderas eléctricas monofásicas son las más comunes, pues la mayoría de las viviendas cuentan con este tipo de instalación. Se trata de un sistema que consta de una única fase y una corriente alterna a una tensión de 220-230 voltios.
Caldera eléctrica trifásica
Las instalaciones trifásicas suelen ser más habituales en empresas, industrias o casas de gran tamaño, ya que requieren mayor potencia. Estas instalaciones constan de 3 fases y 3 corrientes alternas distintas que funcionan a 400 voltios y que dividen la instalación en distintas partes, teniendo cada una de ellas una potencia.
Las calderas eléctricas trifásicas están destinadas para operar en dichas instalaciones, pero pueden funcionar en una instalación monofásica.
Para averiguar si tu instalación es monofásica o trifásica debes acceder al cuadro de luz de la vivienda y ver si el ICP de electricidad es doble (monofásico) o triple (trifásico).
Caldera eléctrica: consumo mensual
El consumo de la caldera eléctrica depende de los siguientes factores:
- Sistema de calefacción (radiadores o suelo radiante).
- Zona climática.
- Tamaño del inmueble.
- Número de habitaciones.
- Envolvente térmica de la vivienda.
- Si la caldera solo cubre calefacción o también ACS.
- Capacidad de regulación de la caldera.
Una caldera eléctrica consume prácticamente los mismos kilovatios hora (kWh) que una caldera de gas, pero las facturas son más elevadas, porque el precio de la electricidad es bastante más caro que el del gas.
A día de hoy el precio de la electricidad es de 0,2 €/kWh, mientras que el del gas natural es de 0,07 €/kWh, casi tres veces menos.
El consumo de una caldera eléctrica y una de gas natural es casi idéntico. Sabiendo que el consumo medio de gas natural en España es de 5.500 kWh/año, de los cuales 4.500 kWh se detsinan a calefacción y ACS, podemos calcular el consumo aproximado de una caldera eléctrica:
Caldera | Consumo anual | Precio kWh | Precio consumo anual |
---|---|---|---|
Caldera eléctrica | 4.500 kWh | 0,2 €/kWh | 900 € |
Caldera de gas | 4.500 kWh | 0,07 €/kWh | 315 € |
Precios sin impuestos aplicados
Que se congelen las facturas, no tu casa
Nuestra selección de calderas no te dejará frío
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En la mayoría de los casos el hecho de instalar una caldera eléctrica requiere subir la potencia de la luz contratada, lo que aumenta aún más el precio de las facturas.
El consumo de una caldera eléctrica se puede reducir si esta dispone de modulación, es decir, si es capaz de reducir la potencia con la que funciona. Por ejemplo, si necesitas una potencia de 12 kW para calentar tu casa, pero tu caldera tiene 18 kW y solo dos niveles de modulación (9 kW y 18 kW), esta tendrá que funcionar a máxima potencia para cubrir las necesidades de la vivienda. Por su parte, si la caldera tiene 6 resistencias de 2 kW, se puede modular para que trabaje con 12 kW de potencia, sin malgastar energía.
Instalación de una caldera eléctrica
La instalación de una caldera eléctrica ha de ser realizada por un instalador de gas autorizado por el Ministerio de Industria.
El precio de instalación de una caldera eléctrica suele estar entre 350 € y 400 €. Recomendamos comparar diferentes presupuestos, ya que los precios varían dependiendo de la empresa autorizada que se elija. Nosotros te recomendamos una de las siguientes empresas:
Diferencias entre la instalación de una caldera eléctrica y una de gas:
- La caldera eléctrica obtiene la energía conectándose únicamente a la red eléctrica, mientras que la caldera de gas necesita conectarse tanto a la red eléctrica como a la instalación de gas.
- La caldera de gas necesita una salida de humos mientras que la eléctrica no.
- Al instalar una caldera de gas, el instalador debe expedir el certificado de instalación de la caldera, que garantiza la correcta instalación. En cambio, cuando se trata de una caldera eléctrica no es necesario ningún certificado.
Todos estos detalles hacen que la instalación de una caldera eléctrica sea mucho más sencilla y económica que la de una caldera de gas.
Caldera eléctrica o de gas: ¿Cuál instalar?
Para poder decidir entre instalar una caldera eléctrica o una de gas hay que conocer los pros y los contras de cada una de ellas:
Caldera eléctrica | Caldera de gas |
---|---|
Rendimiento del 99% | Los modelos de condensación tienen un rendimiento del 109% |
No requieren casi mantenimiento | Necesitan un mantenimiento más frecuente |
No necesitan salida de humos ni desagües | Las calderas de condensación requieren de salida de humos y desagüe |
Instalación un poco más sencilla | Instalación más compleja |
El precio de la electricidad es muy alto | El precio del gas natural es más económico |
No es recomendable para zonas frías que necesitan mucha calefacción | Perfecto para zonas frías donde se necesita mucha calefacción |
Mayor poder contaminante | Menor poder contaminante |
Es necesario aumentar la potencia eléctrica contratada | No es necesario aumentar la potencia eléctrica contratada |
Siempre que sea posible, recomendamos la instalación de una caldera de gas antes que la de una caldera eléctrica, pues el coste de la electricidad eleva el precio de las facturas.
Sin embargo, si a tu hogar no llega el gas natural o si vives en una zona de clima suave, donde la calefacción se usa de forma esporádica, lo más rentable es una instalación de calefacción eléctrica, aunque te recomendamos hacerlo mediante radiadores eléctricos o calefacción por infrarrojos, pues así te ahorras el precio de la instalación de la caldera.
Partes de la caldera eléctrica
Las calderas eléctricas tienen las siguientes partes:
Cuerpo de calefacción
El cuerpo de la calefacción es la parte de la caldera eléctrica donde se calienta el agua para que esta se dirija a los radiadores o al pavimento radiante. Este se compone de de varias partes con funciones que se complementan entre sí:
- Cuerpo: circuito primario construido en acero inoxidable.
- Resistencias: elementos calefactores que se fijan a la parte superior del cuerpo y que son los encargados de calentar el agua.
- Purgador automático: elimina cualquier burbuja de aire contenida en el cuerpo de calefacción
- Salida de calefacción: toma de salida del agua caliente que se dirige a los radiadores o suelo radiante.
- Retorno de calefacción: toma por la que vuelve el agua utilizada por los radiadores que ha de volver a calentarse.
Panel de mandos
En el panel de mandos se halla toda la parte electrónica y de regulación. Aquí se pueden encontrar, por norma general, los siguientes elementos:
- Selectores de potencia: las calderas eléctricas disponen de varios rangos de potencia que el usuario puede elegir en función de las necesidades de la estancia. Estos selectores están conectados a una placa electrónica que regula la potencia a través de unos tiristores.
- Termostato de control: mide la temperatura del circuito primario de calefacción de la caldera y permite reajustarla.
- Termostato de seguridad: si la temperatura de la caldera sube por encima de ciertos valores esta se apaga y no puede volver a encenderse hasta que la caldera está por debajo de lo indicado.
- Programador horario: algunas calderas eléctricas incorporan la función de encendido según la hora y día.
Vaso de expansión
El vaso de expansión es un elemento de seguridad que sirve para absorber los aumentos de presión del agua debido al aumento de temperatura.
Bomba hidraúlica
A parte del cuerpo y del cuadro de mandos, las calderas eléctricas necesitan una bomba que haga que el agua se mueva por todo el circuito, desde la caldera a cada uno de los radiadores o suelo eléctrico.
Dispositivos de seguridad
Además, de todo lo visto, las calderas eléctricas cuentan con distintos dispositivos de seguridad como un presostato en caso de falta de agua o un detector de caudal para que las resistencias no funcionen si no hay caudal, porque puede haber presión pero no moverse el agua.