Cambiar potencia contratada, ¿cuánto cuesta y cómo hacerlo?
Cambiar la potencia contratada es un trámite habitual que permite evitar imprevistos en el suministro eléctrico y ahorrar luz en la factura. A continuación, la forma de realizar este cambio y el precio por trámite.
Elegir la potencia necesaria para un inmueble es una de las decisiones más importantes tanto al dar de alta la luz por primera vez como si se trata de una reactivación del suministro. Sin embargo, cuando la potencia eléctrica ya ha sido contratada con anterioridad y actualmente es más baja o alta de lo necesario, lo más recomendable es realizar un cambio de potencia.
Modificar el número de kilovatios de potencia contratado es un trámite recurrente en casos como:
- Un cambio de titular de luz.
- Al cambiar de tarifa de luz.
- Cuando se tiene contratada una potencia superior a la necesaria, por lo que se paga más de lo imprescindible.
- En casos en los que los kilovatios contratados no son suficientes y salta con frecuencia el ICP de electricidad, interrumpiéndose constantemente el suministro, es necesario subir la potencia de la luz.
En el momento de realizar un cambio de potencia es posible realizarlo tan solo para uno de los dos periodos horarios establecidos: punta y llano, o hacerlo para ambos.
A la hora de realizar un cambio de potencia será imprescindible que en el Boletín eléctrico, que recoge las condiciones de seguridad en la instalación de la vivienda o local, se determine la posibilidad de contratar la cantidad de kilovatios por la que se opta.
¿Cómo cambiar la potencia contratada de la luz?
Antes de realizar el trámite, lo más recomendable es calcular la potencia eléctrica necesaria para el inmueble en cuestión, ya sea una potencia trifásica o monofásica. Una vez se sea consciente de cual es la que más conviene, en términos económicos y de efectividad, habrá que proceder a realizar el cambio:
Decidir la potencia con la que se quiere contar a partir de ese momento. Puede calcularse manualmente, mediante un electricista o una calculadora online.
Localizar, si es posible, una factura de las que se han recibido hasta el momento. Habrá que facilitar determinada información a la compañía con la que se realice el trámite.
Contactar con la comercializadora con la que se tenga contratada la luz (en caso de querer cambiar, con la que se haya decidido contar a partir de ahora) o directamente con la distribuidora.
El cambio de potencia será efectivo en aproximadamente 2 semanas, aunque este periodo de tiempo puede ampliarse hasta los 21 días dependiendo de la compañía y el tipo de contador.
¿Cuánto cuesta cambiar la potencia contratada?
A la hora de cambiar la potencia contratada es necesario diferenciar entre el coste que puede suponer llevar a cabo el trámite, en concepto de gestión y depósito de garantía por parte de la distribuidora que corresponda, y el gasto que el cambio suponga en concepto de los derechos de enganche, extensión y acceso pertinentes.
En ambos casos la cantidad a abonar será diferente en función de si se necesita subir o bajar la potencia contratada:
Coste por subir potencia
Cuando se realice un cambio de potencia para aumentar el número de kilovatios, la distribuidora podrá solicitar el abono de una fianza económica denominada depósito de garantía e, incluso, el abono de los derechos de verificación en caso de que la instalación tenga más de 20 años.
Independientemente de lo anterior, el consumidor, al subir la potencia, tendrá que hacer frente al pago de los derechos de extensión, 17,37 euros por kW que se suba, y de los derechos de acceso, 19,70 euros por cada kW de más.
Coste por bajar potencia
En estos casos las distribuidoras no exigen el pago del depósito de garantía, por lo que el único gasto a tener en cuenta serán los derechos de enganche, cuyo precio gira en torno a los 9 euros más impuestos. El precio será independiente de la cantidad de kilovatios en que se reduzca la potencia y cuya cantidad será incluida en la primera factura tras realizarse el cambio.
Desde 2018, puede elegirse cualquier potencia cuyos kilovatios sean múltiplo de 0,1 kW, haciendo que la potencia normalizada que había regulada anteriormente ya no represente las únicas que se pueden contratar.
¿Cuántas veces se puede cambiar la potencia contratada?
Por norma general, las distribuidoras solo permiten realizar un cambio de potencia al año. Sin embargo, estas suelen ser más permisivas cuando se trata de un aumento de kilovatios que cuando se trata de un descenso en la potencia.
De cualquier forma, el cliente puede ponerse en contacto vía telefónica con la distribuidora encargada del suministro (esta no se puede elegir) y solicitar el cambio:
Además, la comercializadora con la que se tenga contratada la tarifa pertinente puede servir de intermediaria entre el cliente y la distribuidora para realizar la gestión:
¿Qué documentos necesito para cambiar la potencia contratada de la luz?
La documentación solicitada para cambiar la potencia puede cambiar ligeramente dependiendo de la compañía que realice el trámite. Sin embargo, será siempre imprescindible la siguiente información:
- Nombre, apellidos y DNI.
- Número CUPS.
- Número de cuenta.
- Potencia actual y potencia que se quiere contratar.
- Boletín eléctrico.
¿Cuánto tiempo tarda la distribuidora en cambiar la potencia?
El periodo de tiempo aproximado para que se lleve a cabo el cambio suele ser de 14 días, aunque puede haber casos en los que se realice con mayor celeridad y otros en los que el plazo de tiempo alcance las tres semanas. Este periodo de tiempo puede depender del tipo de contador y de la distribuidora que lleve a cabo el cambio.
En cuanto al tiempo que tardará en ser cobrado el debido importe por realizar el cambio, este será incluido en la primera factura a partir de que ya se cuente con la nueva potencia en la casa, piso o local.
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